01 agosto, 2019
Sara + Jesús, la boda bohemia más feliz
Dicen que una novia debe llevar cuatro cosas para tener buena suerte: algo nuevo, algo viejo, algo prestado y algo azul. No soy muy supersticiosa, y no sé si Sara y Jesús cumplieron todas las consignas en su boda bohemia, pero te aseguro que es una de las bodas más felices que he visto.
Como ya sabes, agradezco un montón que nos enviéis fotos de vuestra boda. Me encanta ver dónde va la historia de aquella chica que vino a vernos un día a nuestro atelier de novias en Barcelona, o aquella que nos preguntó sus dudas online y tuvo su vestido en casa en una semana. Me siento súper afortunada. Y vivo las fotos como si yo misma estuviera presente ese día. Por eso cuando Sara nos envió fotos de su gran día, que reflejaban tanta energía y buen rollo, me puse realmente feliz. Creo que no había mejor forma de agradecérselo que enseñándole al mundo ese día tan alegre y único.
Sara y Jesús se conocieron en su pueblo natal, en Menorca. He estado en Menorca y te puedo decir que es una isla preciosa, con mares azules y una brisa con la que da gusto pasear por sus maravillosas playas, así que no se me ocurre un escenario mejor para esta historia. Sara estaba paseando por las calles del casco antiguo. En un bar, se encontró con un antiguo compañero de piso de su hermano. Ella iba para saludarle, pero se quedó para hablar con ese chico tan guapo que lo acompañaba. Ese chico era Jesús. Y Sara se olvidó de a dónde iba y decidió quedarse toda la noche hablando con él, hasta que se dieron los teléfonos. Y así poco a poco siguieron hablando, conociéndose, enamorándose… hasta culminar esta relación en una preciosa y feliz boda bohemia ♥
Sara me cuenta que se definirían como una pareja sencilla. Les gusta ir al cine, a la playa en verano y a la montaña en invierno, y sobre todo disfrutar de una buena tarde de sofá. Eso sí, sus dos niños hacen que los domingos por la tarde toque ¡sesión de juegos infantiles!
Aunque Jesús es más de deporte y Sara se define más como “cervecita y amigas”, hay algo que apasiona y une a Sara y a Jesús al máximo: viajar. Son unos entusiastas totales de ahorrar para viajar lo máximo posible. Y no me puede parecer mejor idea. Me parece algo maravilloso que una pareja como Sara y Jesús, con mil cosas que hacer y dos niños, sigan buscando nuevas aventuras para que entren en sus vidas. Y por experiencia diré que, ya sean cortas o largas distancias, ver mundo crea una mejor versión de ti mismo.
Sara soñaba desde hacía más de dos años con que se quería casar en una preciosa boda bohemia, pero Jesús no se definía como alguien “de esas cosas”, así que el tema estaba un poco en el aire. Un día, decidieron hacer un viaje a Andorra los dos solos. Estuvieron todo el día esquiando y relajándose en un SPA, y después fueron en busca de un restaurante donde cenar. Hacía un frío terrible, (¡estaban a -4ºC!), y no encontraban nada. Andaron y andaron, hasta que al final dieron con un bar en el que servían algunas tapas. Pidieron algo para comer y una botella de vino.
Cuando salieron del bar, Jesús miró hacia los dos lados, vio que no había nadie, se arrodilló ¡y le hizo la gran pregunta a Sara! Y Sara llorando de la felicidad, claro ¡su sueño se había cumplido! ¡Se iban a casar! Y Jesús había dejado su vergüenza a un lado para hacer realidad el sueño de su pareja. Me parece una historia sencilla y súper emotiva a la vez. Precioso ♥
¡Y por fin la boda bohemia de Sara y Jesús llegó! Como no podía ser de otra manera, la boda fue en Ciutadella, en Menorca. Y la verdad es que me parece súper emocionante el escenario escogido, porque fue ni más ni menos que el bar de copas donde se conocieron unos años antes. La ceremonia fue en el jardín, y tú misma puedes ver en las fotos que fue algo precioso. Como te contaba al principio del post, hay muchas tradiciones diferentes por lo que respecta a las bodas. Una de ellas es tirar arroz a los recién casados en símbolo de buena suerte. Pues Sara y Jesús tuvieron su tradición personalizada: los invitados hicieron caer sobre ellos con una lluvia de avellanas (con mucho amor), típica de las fiestas de Sant Joan en Menorca. ¡Súper original!
Cuando acabó la ceremonia, una moto con sidecar les esperaba para dar una vuelta por las calles de Ciutadella. ¡Y es que esta boda bohemia no puede tener más estilazo! Agregar un vehículo con tanto rollazo me parece que da mucho carácter a la boda, ¡me encanta! De hecho, Cristina, que escogió un Mimètik para sus damas de honor, también incluyó una furgoneta en su boda bohemia. Además, el color de la boda era el azul, como puedes ver en las decoraciones, en el traje de Jesús, y en los complementos de Sara, así que decidieron seguir con esta temática y añadir unos globos azules al sidecar. La verdad es que no podría haber salido mejor. Nuestras chicas Mimètik son súper originales ♥
En la parte de convite de su boda bohemia, Sara y Jesús lo prepararon todo muchísimo mimo. ¡Incluso crearon ellos mismos los centros de mesa! Pero hay un detalle que me enamoró en cuanto Sara me enseñó sus fotos de la boda. El detalle son unas fotos personalizadas que pusieron en cada sitio de los invitados, unas fotos de cuando cada uno era pequeño. Me parece una idea genial, porque así cada uno sabe dónde sentarse de una forma preciosa y súper emotiva. Y además, cada foto iba con un imperdible, por lo que cada invitado podía colocársela en el traje para que todos supieran cuál era su nombre (¡y cómo era de pequeño!). Es algo súper personal, es del tipo de detalles que marcan la diferencia.
Sara tenía claro desde el principio que quería una boda bohemia y que necesitaba un vestido de novia bohemio. Así que se recorrió todas las tiendas de Menorca y Mallorca y no hubo suerte, nada le convencía. Se decidió a mirar tiendas por internet que estuvieran en Barcelona, ya que tiene familiares que viven aquí. Lo organizó todo para una escapada express y concertó algunas citas. La verdad es que me emociona mucho cómo lo explica Sara. Y me emociona más que todavía se acuerde de todos los detalles. Así que prefiero que sea ella misma la que te cuente cómo vivió su primer momento con Mimètik:
La verdad es que Sara estaba guapísima con su Frida Bohemian en encaje Champagne. Me encanta el espíritulo de Sara, porque luego en la fiesta cambió su vestido de posición y lo convirtió en un Gala Bohemian en encaje Champagne simplemente con la ayuda de unas tiras accesorias ¡Total! Además, como te comentaba antes, Sara decidió ir con el “algo azul” de las bodas, y optó por introducir algunos detalles en este color como accesorios e incluso los zapatos. Me parece algo súper original. Le da mucha personalidad a la novia, y que le aporta un toque de color y alegría, súper representativo de nuestras Novias Mimètik ♥
Como ves, la boda bohemia de Sara y Jesús fue un día súper feliz, con unos toques de azul y un sidecar que le aportaron toda la personalidad que esta pareja desprende. Quiero darle las gracias a los dos por hacernos partícipes de su historia, y sobre todo a Sara por escogernos. No puedo estar más encantada de que seas una Novia Mimètik, eres luz y os deseo todo lo mejor.
Por último, quiero agradecerle a Carles Mascaró por estas fotografías tan preciosas y que consiguen transmitir toda la buena energía y felicidad que estoy segura se vivió en un día tan especial. Él también ha hecho un artículo sobre esta preciosa boda bohemia con un montón de fotos, te lo dejo por aquí por si le quieres echar un vistazo.
Con mucho amor,
Como ya sabes, agradezco un montón que nos enviéis fotos de vuestra boda. Me encanta ver dónde va la historia de aquella chica que vino a vernos un día a nuestro atelier de novias en Barcelona, o aquella que nos preguntó sus dudas online y tuvo su vestido en casa en una semana. Me siento súper afortunada. Y vivo las fotos como si yo misma estuviera presente ese día. Por eso cuando Sara nos envió fotos de su gran día, que reflejaban tanta energía y buen rollo, me puse realmente feliz. Creo que no había mejor forma de agradecérselo que enseñándole al mundo ese día tan alegre y único.
La historia de amor más cercana
Sara y Jesús se conocieron en su pueblo natal, en Menorca. He estado en Menorca y te puedo decir que es una isla preciosa, con mares azules y una brisa con la que da gusto pasear por sus maravillosas playas, así que no se me ocurre un escenario mejor para esta historia. Sara estaba paseando por las calles del casco antiguo. En un bar, se encontró con un antiguo compañero de piso de su hermano. Ella iba para saludarle, pero se quedó para hablar con ese chico tan guapo que lo acompañaba. Ese chico era Jesús. Y Sara se olvidó de a dónde iba y decidió quedarse toda la noche hablando con él, hasta que se dieron los teléfonos. Y así poco a poco siguieron hablando, conociéndose, enamorándose… hasta culminar esta relación en una preciosa y feliz boda bohemia ♥
Una pareja sencilla
Sara me cuenta que se definirían como una pareja sencilla. Les gusta ir al cine, a la playa en verano y a la montaña en invierno, y sobre todo disfrutar de una buena tarde de sofá. Eso sí, sus dos niños hacen que los domingos por la tarde toque ¡sesión de juegos infantiles!
Aunque Jesús es más de deporte y Sara se define más como “cervecita y amigas”, hay algo que apasiona y une a Sara y a Jesús al máximo: viajar. Son unos entusiastas totales de ahorrar para viajar lo máximo posible. Y no me puede parecer mejor idea. Me parece algo maravilloso que una pareja como Sara y Jesús, con mil cosas que hacer y dos niños, sigan buscando nuevas aventuras para que entren en sus vidas. Y por experiencia diré que, ya sean cortas o largas distancias, ver mundo crea una mejor versión de ti mismo.
Un proposición íntima
Sara soñaba desde hacía más de dos años con que se quería casar en una preciosa boda bohemia, pero Jesús no se definía como alguien “de esas cosas”, así que el tema estaba un poco en el aire. Un día, decidieron hacer un viaje a Andorra los dos solos. Estuvieron todo el día esquiando y relajándose en un SPA, y después fueron en busca de un restaurante donde cenar. Hacía un frío terrible, (¡estaban a -4ºC!), y no encontraban nada. Andaron y andaron, hasta que al final dieron con un bar en el que servían algunas tapas. Pidieron algo para comer y una botella de vino.
Cuando salieron del bar, Jesús miró hacia los dos lados, vio que no había nadie, se arrodilló ¡y le hizo la gran pregunta a Sara! Y Sara llorando de la felicidad, claro ¡su sueño se había cumplido! ¡Se iban a casar! Y Jesús había dejado su vergüenza a un lado para hacer realidad el sueño de su pareja. Me parece una historia sencilla y súper emotiva a la vez. Precioso ♥
La feliz (y azul) boda bohemia
¡Y por fin la boda bohemia de Sara y Jesús llegó! Como no podía ser de otra manera, la boda fue en Ciutadella, en Menorca. Y la verdad es que me parece súper emocionante el escenario escogido, porque fue ni más ni menos que el bar de copas donde se conocieron unos años antes. La ceremonia fue en el jardín, y tú misma puedes ver en las fotos que fue algo precioso. Como te contaba al principio del post, hay muchas tradiciones diferentes por lo que respecta a las bodas. Una de ellas es tirar arroz a los recién casados en símbolo de buena suerte. Pues Sara y Jesús tuvieron su tradición personalizada: los invitados hicieron caer sobre ellos con una lluvia de avellanas (con mucho amor), típica de las fiestas de Sant Joan en Menorca. ¡Súper original!
Cuando acabó la ceremonia, una moto con sidecar les esperaba para dar una vuelta por las calles de Ciutadella. ¡Y es que esta boda bohemia no puede tener más estilazo! Agregar un vehículo con tanto rollazo me parece que da mucho carácter a la boda, ¡me encanta! De hecho, Cristina, que escogió un Mimètik para sus damas de honor, también incluyó una furgoneta en su boda bohemia. Además, el color de la boda era el azul, como puedes ver en las decoraciones, en el traje de Jesús, y en los complementos de Sara, así que decidieron seguir con esta temática y añadir unos globos azules al sidecar. La verdad es que no podría haber salido mejor. Nuestras chicas Mimètik son súper originales ♥
La fiesta más personal
En la parte de convite de su boda bohemia, Sara y Jesús lo prepararon todo muchísimo mimo. ¡Incluso crearon ellos mismos los centros de mesa! Pero hay un detalle que me enamoró en cuanto Sara me enseñó sus fotos de la boda. El detalle son unas fotos personalizadas que pusieron en cada sitio de los invitados, unas fotos de cuando cada uno era pequeño. Me parece una idea genial, porque así cada uno sabe dónde sentarse de una forma preciosa y súper emotiva. Y además, cada foto iba con un imperdible, por lo que cada invitado podía colocársela en el traje para que todos supieran cuál era su nombre (¡y cómo era de pequeño!). Es algo súper personal, es del tipo de detalles que marcan la diferencia.
El vestido de novia bohemio ♥
Sara tenía claro desde el principio que quería una boda bohemia y que necesitaba un vestido de novia bohemio. Así que se recorrió todas las tiendas de Menorca y Mallorca y no hubo suerte, nada le convencía. Se decidió a mirar tiendas por internet que estuvieran en Barcelona, ya que tiene familiares que viven aquí. Lo organizó todo para una escapada express y concertó algunas citas. La verdad es que me emociona mucho cómo lo explica Sara. Y me emociona más que todavía se acuerde de todos los detalles. Así que prefiero que sea ella misma la que te cuente cómo vivió su primer momento con Mimètik:
"La primera cita la tenia a las 11 con Mimètik. Subí las escaleras. Me abrieron la puerta y en el maniquí vi mi vestido. Lo había visto online pero es que en directo me emocioné. Me lo probé y supe que ese era mi vestido. Las demás citas las anulé, ya no busque más. Nos fuimos a celebrar, mi hermana, mi cuñada y yo, que ya tenía vestido. Fue genial."
La verdad es que Sara estaba guapísima con su Frida Bohemian en encaje Champagne. Me encanta el espíritulo de Sara, porque luego en la fiesta cambió su vestido de posición y lo convirtió en un Gala Bohemian en encaje Champagne simplemente con la ayuda de unas tiras accesorias ¡Total! Además, como te comentaba antes, Sara decidió ir con el “algo azul” de las bodas, y optó por introducir algunos detalles en este color como accesorios e incluso los zapatos. Me parece algo súper original. Le da mucha personalidad a la novia, y que le aporta un toque de color y alegría, súper representativo de nuestras Novias Mimètik ♥
Consejo para futuras novias
"Disfrutad mucho de los preparativos y, aunque suene a tópico, disfrutad de toda la boda porque es un día mágico e inolvidable."
¿Y tú?
Como ves, la boda bohemia de Sara y Jesús fue un día súper feliz, con unos toques de azul y un sidecar que le aportaron toda la personalidad que esta pareja desprende. Quiero darle las gracias a los dos por hacernos partícipes de su historia, y sobre todo a Sara por escogernos. No puedo estar más encantada de que seas una Novia Mimètik, eres luz y os deseo todo lo mejor.
Por último, quiero agradecerle a Carles Mascaró por estas fotografías tan preciosas y que consiguen transmitir toda la buena energía y felicidad que estoy segura se vivió en un día tan especial. Él también ha hecho un artículo sobre esta preciosa boda bohemia con un montón de fotos, te lo dejo por aquí por si le quieres echar un vistazo.
Con mucho amor,