Mujeres fuertes que me inspiran: Marie Curie
Hace tiempo escribí un post sobre Frida Kahlo. En él te explico que me gusta homenajear a mujeres fuertes y relevantes de la historia poniendo sus nombres a mis diseños. Me parece un acto de sororidad y de conexión con el género femenino.
En aquellos días, justo iba a sacar mi modelo Frida, que ha acompañado a tantas Novias Mimètik desde entonces. Hace poco volví a sacar una nueva colección de novia, por lo que otro modelo más se unió a Mimètik. Cuando estaba en la fase de diseño, me empezaba a plantear qué nombre podría darle a ese vestido. Era algo sencillo y más sobrio que mis otros modelos, y súper elegante a la vez. Entonces empecé a pensar en campos en los que las mujeres estaban más infravaloradas, y aunque esto es tristemente todavía frecuente hoy en día en la mayoría de disciplinas, pienso que las mujeres científicas son las más desconocidas. Y ahí lo tuve claro: mi nuevo vestido de novia se llamaría Marie en honor a Marie Curie, una científica pionera y única en su tiempo.
Marie Curie nació como Maria Skłodowska un día como hoy en 1867 en Polonia, durante la ocupación rusa, y tuvo que irse a estudiar a Francia, pues en su país no estaba permitido que las mujeres alcanzaran ciertos niveles de educación. Eso nunca hizo que se olvidara de sus raíces, siempre supo de dónde provenía y su cultura siempre estuvo muy presente en su familia. Fue una mujer llevada por las ganas de conocer más, y de descubrir lo que otros creían imposible. Motivada desde el primer momento por sus ganas de aprender, no dejó que ninguna injusticia frenara su brillante carrera como científica. Precisamente es su tenacidad lo que más me gusta de ella. No dejó que nadie decidiera por ella por el simple hecho de ser mujer. Tomó las riendas de su destino, tanto personal como profesional, durante toda su vida.
Marie Curie fue una auténtica pionera en su campo. Luchó por labrarse un futuro y poder estudiar siendo mujer. De hecho, consiguió ingresar en la Universidad de la Sorbona y se graduó en Física como la primera de su promoción y en Matemáticas como la segunda. Un tiempo después, recibió el Nobel de Física junto con su marido y otro gran científico, convirtiéndose así en la primera mujer de la historia que lo conseguía. Pero los hitos de Marie no acabaron ahí, pues también fue nombrada la primera mujer Catedrática de la Universidad de la Sorbona de París. Marie no dio por satisfecha su curiosidad, y siguió investigando, hasta que descubrió que la radioterapia podría ser un tratamiento contra el cáncer. Así que solamente 5 años después de ganar su Nobel de Física, Marie ganó el premio Nobel de Química, esta vez en solitario. Así fue como Marie se convirtió no solo en la primera mujer en ganar dos de estos prestigiosos premios, si no en la primera persona de la historia en lograrlo. Actualmente, más de 100 años después, tan solo 3 personas más han conseguido este reconocimiento.
Marie Curie fue una persona totalmente inspiradora, centrada en su trabajo y en su lucha por el reconocimiento propio, sin interferencias injustas de ideologías retrógradas. En sus conversaciones y explicaciones, dejó algunas frases realmente motivadoras. Nada me gustaría más que que alienten a las niñas de hoy en día a convertirse en futuras investigadoras como Marie si eso es lo que sueñan.
“No hay que temer a nada en la vida, solo hay que comprender.”
“La vida no merece que uno se preocupe tanto.”
“Convendría sentir menos curiosidad por las personas y más por las ideas.”
“La ciencia la hacen personas, donde sea, en una buhardilla, cuando tienen el genio investigador, y no los laboratorios, por ricos que se construyan y se doten.”
Y para terminar, una de sus reflexiones que más me ha llegado al alma:
“La vida no es fácil, para ninguno de nosotros. Pero… ¡Qué importa! Hay que perseverar y, sobre todo, tener confianza en uno mismo. Hay que sentirse dotado para realizar alguna cosa y que esa cosa hay que alcanzarla, cueste lo que cueste.”
Espero que la historia de esta mujer tan curiosa como innovadora te haya resultado tan interesante e inspiradora como a mí.
Un abrazo,